Alimentos para la primavera
Ya llega la primavera y, con ella, muchos alimentos llenos de color y sabor para mantenernos en plena forma. No es de extrañar que las tradiciones culinarias de las regiones se guíen por alimentos de temporada, optando por el gazpacho en verano o por las setas en invierno, pues es cuando ciertos alimentos tienen una mayor calidad organoléptica. ¿Te habías parado a pensar en ello alguna vez?
Al encontrarse en su punto óptimo para el consumo, los alimentos de temporada son más sabrosos, conservan mejor su textura, apariencia y sabor, y aportan una mayor cantidad de nutrientes. Además, si son de temporada significa que abundan más durante esa época del año, así que son más accesibles y, por lo tanto, más baratos. También hay que tener en cuenta que hablar de productos de temporada conlleva hablar de productos de proximidad. Por lo tanto, ayudan a impulsar y mantener la economía local, a la vez que incorporamos nuevos ingredientes a nuestra dieta y rompemos con la monotonía.
Esta es una selección de la gran variedad de frutas y verduras de temporada que nos ofrece la dieta mediterránea en una de las estaciones más coloridas del año:
Fruta
- Albaricoque: rico en betacaroteno, cuenta con grandes cantidades de potasio y vitamina C. Es importante tener en cuenta que los ejemplares más dulces y jugosos se encuentran a partir del mes de mayo.
- Cereza: conocida por tener entre sus principales propiedades la de favorecer el sueño, es rica en potasio y vitaminas A y C. También tiene un efecto diurético que permite eliminar el exceso de agua y prevenir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
- Fresa: su sabor, dulce y ácido a la vez, hace de ella la reina indiscutible de la primavera. Suma puntos el hecho de que tenga muy pocas calorías y, por el contrario, un alto contenido de fibra, antioxidantes y vitamina C.
- Níspero: la fruta más mediterránea protege la membrana de la mucosa intestinal de sustancias tóxicas. Conocido por sus propiedades antivirales, es un gran regulador de la digestión y el tránsito intestinal.
Verdura
- Berenjena: uno de los alimentos más consumidos y versátiles de nuestra dieta. Sus propiedades hacen de la berenjena un alimento ideal para combatir el envejecimiento celular, las infecciones y mantener el colesterol a raya.
- Espárrago verde: fuente de fibra y de minerales, este alimento hipocalórico también es rico en vitaminas A, B, C, E, K y ácido fólico. Destaca por su aporte en minerales como el magnesio, fósforo, calcio y potasio.
- Haba: considerada verdura si la consumimos tierna, con un alto contenido en ácido fólico, esencial para el crecimiento de nuevas células, prevenir la anemia y producir glóbulos rojos, mejora la actividad cardiovascular (reduciendo el colesterol malo y equilibrando el azúcar en sangre).
- Espinaca: una de las verduras de hoja verde que más riqueza en vitaminas y minerales tiene. Destaca especialmente la vitamina K, que ayuda a retener el calcio para una correcta mineralización ósea.
De la misma manera, hay algunos alimentos de invierno que nos acompañan durante un pequeño periodo en primavera, como la acelga, el brócoli o la col, productos muy beneficiosos para una correcta circulación.
¡Recuerda! Los expertos recomiendan un mínimo de tres piezas de fruta al día, y dos de verduras u hortalizas (una de las cuales debería tomarse cruda), por lo que optar por una dieta de temporada nos permite incluir verduras en todas las comidas, y apostar por las frutas y verduras crudas como tentempiés.
En cuanto a carnes y pescados, la primavera también es época de algunos de ellos, como el cordero, la oca, el pavo, el besugo, la anchoa, el atún rojo o el mejillón.
¡Déjate inspirar y alegra tus platos de la manera más rica y sostenible!