Claves para comer bien en la oficina

Pasamos gran parte de nuestro día en la oficina o puesto de trabajo, por lo que es importante establecer una rutina con las pautas alimentarias correctas. El conocido como “menú de tupper” supone grandes beneficios, no solo para nuestro bolsillo, sino también para nuestra dieta y bienestar. ¡Te demostramos que comer bien y variado en la oficina es posible!

Come cada 2-3 horas

Se recomienda que el desayuno y el almuerzo sean las dos ingestas más copiosas del día, mientras que los snacks de media tarde y la cena sean ligeros. Asimismo, lo ideal es comer algo cada tres o cuatro horas, para evitar las bajadas de azúcar en nuestro organismo o los atracones al llegar a casa. Escoger una opción saludable entre horas, como una pieza de fruta o un puñado de frutos secos, es una buena opción. Aunque los frutos secos sean más altos en calorías, tomados con moderación suponen una fuente muy interesante de omega 3, fibra, proteínas, vitamina E y selenio. 

Lleva la cantidad que vayas a comer

Servirse comida de más es un error muy común a la hora de prepararse comida para llevar. Nuestro consejo es que lleves encima la cantidad exacta que vayas a consumir, así evitarás excederte. Es importante incluir proteínas, carbohidratos, vitaminas, grasas y fibra, como si estuviéramos en casa. Si dudas en la organización de tus comidas, en nuestro artículo del blog “organiza tu menú semanal saludable” te decimos cómo crear platos equilibrados y saludables. 

Planificate durante el fin de semana

Si entre semana no tienes tiempo para preparar tu tupper, puedes aprovechar el fin de semana para planificar el menú semanal e incluso cocinar para toda la semana. El conocido como ‘batch cooking’, que no es más que cocinar en grandes cantidades para repartirlas durante toda la semana, se ha puesto muy de moda entre las familias que trabajan y a las que les cuesta encontrar tiempo para planificar su alimentación. Si apostamos por técnicas como cocinar a la plancha, al vapor, al horno o al papillote, nuestras comidas serán mucho más saludables, ya que se absorberán menos aceites y tendremos digestiones más ligeras.

Tómate tu tiempo

Aunque a veces se acumule tanto trabajo en la oficina que comer algo rápido frente al ordenador se presente como la mejor opción, ¡cuidado! Inconscientemente comemos mucho más cuando estamos en frente de cualquier tipo de pantalla. Es importante masticar correctamente los alimentos para poder digerirlos como es debido, por lo que hacerlo deprisa y mal puede dificultar la absorción de los nutrientes. Esto puede desencadenar en una mayor sensación de hambre, aumentando el riesgo de sufrir sobrepeso. ¡Tómate tu tiempo y de paso aprovecha para descansar la vista!

Cuida tu hidratación

Y por último, y no menos importante: la hidratación. Los síntomas de la deshidratación son similares a los del apetito, por lo que en ocasiones sentimos que tenemos hambre, cuando en realidad tenemos sed. Tener siempre un vaso de agua a mano nos ayudará a mantener los niveles óptimos para el tránsito intestinal, permitiendo que el cerebro se mantenga activo y pudiendo regular la temperatura corporal. 

La escasez de tiempo a la hora de organizar las comidas puede ser motivo para caer en malos hábitos alimentarios. En Bon Pollo aconsejamos la planificación de tus comidas semanales para evitar la monotonía y poder llevar una alimentación equilibrada, sana y variada.