Qué no puede faltar en tu despensa estas Navidades

Falta cada vez menos para Navidad: han puesto las luces en las calles, en el supermercado ya encuentras tu turrón favorito y puede que incluso se te haya metido en la cabeza algún que otro villancico.

Es normal que estés comenzando a planificar las Navidades: poner el árbol, el belén, organizar el calendario de reuniones familiares… Y, cómo no, elegir un buen menú navideño. ¿Ya se te está haciendo cuesta arriba y todavía no han empezado las fiestas?

En este artículo te daremos unas cuantas claves para mantener un equilibrio estas Navidades. Parece una tarea imposible, pero se puede lograr. Te contamos qué no puede faltar en tu despensa para que disfrutes comiendo, pero sigas cuidándote.

Disfruta de las fiestas navideñas

Para empezar, debes tener claro que las comidas navideñas son para disfrutar. No pasa nada porque te pases con el dulce o con los aperitivos: durante las fiestas todos hacemos excepciones con nuestra dieta.

Obviamente, no sería sano vivir todo el año a base de comilonas como las de Nochebuena, Navidad, San Esteban, Nochevieja o Reyes, pero podemos permitírnoslo precisamente porque se trata de ocasiones especiales.

Sin embargo, es cierto que estas fechas señaladas están todas muy juntas en el calendario, así que es más que probable que acabemos con empachos navideños, digestiones pesadas y algún que otro kilo de más que nos acompañará durante la cuesta de enero.

Planifica un menú equilibrado

La mejor forma de evitar todo esto es planificando un menú navideño equilibrado. Te aconsejamos que planees la secuencia de platos de manera que estos engloben una proporción adecuada de los nutrientes que nuestro organismo necesita.

Ten en cuenta las cantidades: si sirves muchos canapés, tus invitados no tendrán hambre cuando paséis al plato principal. Es mejor comer de todo en pequeñas cantidades que no repetir muchas veces de lo mismo. 

Te lo aseguramos: podemos elaborar un menú igual de exquisito teniendo en cuenta la cantidad de hidratos, proteínas y grasas que vamos a consumir.

Alimentos que no pueden faltar en tu despensa

Los frutos secos tienen incontables beneficios para la salud, por lo que son una muy buena opción para combinar con los quesos durante el aperitivo, por ejemplo. Así evitamos los fritos y los procesados. 

¡Y no te olvides de preparar una buena ensalada! Tanto los comensales como vuestra digestión agradecerán que incluyas verduras en el menú. La calabaza, el puerro, la espinaca y la coliflor son algunas de las hortalizas invernales con las que podrás crear suculentos platos.

Te aconsejamos no excederte con los embutidos durante los entrantes si luego has cocinado un asado u otro tipo de carne. Lo recomendable es alternar los tres macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono y grasas) de manera equilibrada. 

Pasemos al plato principal. El pollo siempre es una buena opción, ya sea al horno o en un caldo de Navidad: es una carne magra y gustosa, poco grasa y de muy fácil digestión, que nos proporciona proteínas, vitaminas y minerales de gran calidad, y combina muy bien con todo tipo de verduras. Además, es muy versátil, así que puedes elaborar un sinfín de recetas navideñas cuyo protagonista sea el pollo.

Cuando llegue el momento del postre, acuérdate de ofrecer fruta junto a los obligatorios turrones. Los cítricos son muy digestivos, por lo que nos ayudan a mejorar el tránsito intestinal tras las comilonas navideñas. 

La mandarina es una fruta de temporada ideal para presentar como postre después de un buen festín, por su pequeño tamaño y sus innumerables beneficios nutricionales. También puedes animarte a elaborar un sorbete de frutas para servir entre el plato principal y los dulces.

Un truco visual para disponer de una buena variedad de nutrientes en tu mesa es que haya color en tu menú navideño. Cuanta más diversidad de colores, más tipos de vitaminas y minerales esenciales estarás combinando.

La importancia de hidratarse bien

Este punto es clave siempre, pero más aún durante las fiestas navideñas, cuando nos ofrecen todo tipo de bebidas alcohólicas y carbonatadas: bebe abundante agua. Las infusiones también te ayudarán a mejorar la digestión.

Así que ya sabes: planifica bien las recetas que conformarán tu menú navideño para evitar un exceso de proteína, hidratos o grasas, añade siempre opciones a base de verduras frescas y fruta, come de todo en pequeñas cantidades, hidrátate mucho y, sobre todo, ¡disfruta de las fiestas!