El arroz de pollo con judías verdes es uno de los platos más típicos en todas las casas de España. Y la razón es sencilla: es fácil de hacer y el resultado es increíble.
A pesar de que los procesos son sencillos, debes prestar mucha atención a los tiempos de cocción. El resultado del plato dependerá en gran medida de si el arroz está bien cocido, te ha quedado demasiado duro o se te ha pasado.
Para acompañar el plato, desde Bon Pollo te proponemos unos gajos de limón. Le darán una frescura increíble y, en pleno verano, se agradece… ¿Te animas a probarlo?
Elaboración
- Pelar y cortar la cebolla y los dientes de ajo en dados pequeños (brunoise). Reservar.
- Lavar y cortar los pimientos, retirando las semillas y las partes blancas, en dados pequeños (brunoise). Reservar.
- Retirar las puntas de las judías y cortar en dados medianos (mirepoix). Reservar.
- Calentar un poco de aceite en una cazuela y dorar el pollo a fuego medio, con una pizca de hierbas provenzales. Salpimentar y reservar.
- En la misma cazuela, pochar la cebolla y los ajos a fuego medio.
- Desglasar con el vino blanco y subir el fuego para que se evapore el alcohol.
- Incorporar los pimientos y cocinar durante 5 minutos a fuego medio.
- Añadir la salsa de tomate y la carne de pimiento choricero. Mezclar y rehogar durante 5 minutos. Salpimentar.
- Añadir el pollo y el arroz. Cocer durante un par de minutos a fuego medio, sin dejar de remover (nacarar el arroz).
- Incorporar el caldo (templado), las judías y unas hebras de azafrán. Cocer durante 15-18 minutos a fuego medio-bajo.
- Dejar reposar el arroz durante 2 minutos, tapado fuera del fuego.
- Para emplatar, servir la paella de pollo en un plato y acompañar con unos gajos de limón.