
¿Algún fan de las hamburguesas por aquí? Hoy os traemos una receta que os encantará: hamburguesa de pollo de crecimiento lento con salsa de tomate, queso y cebolla.
Hay mil maneras distintas de disfrutar de una hamburguesa. En esta ocasión, hemos cogido los ingredientes que normalmente colocaríamos entre dos panes y los hemos horneado y triturado, hasta formar una salsa de campeonato.
Pero lo mejor de esta receta es, sin duda, la jugosa hamburguesa de pollo de crecimiento lento. Pruébala y notarás la diferencia.
Elaboración
- Precalentar el horno a 200 °C.
- Pelar y cortar las cebollas en juliana fina. Reservar.
- Pelar los dientes de ajo. Reservar.
- Lavar los tomates cherry. Reservar.
- Calentar un poco de aceite en una sartén y pochar las cebollas durante 10 minutos a fuego medio.
- Desglasar con la salsa de soja y el vino tinto. Subir el fuego para que se evapore el alcohol.
- Salpimentar y dejar cocer 10 minutos más a fuego medio. Reservar.
- Colocar los tomates, el queso y los dientes de ajo en una bandeja de horno y añadir un chorrito de aceite, un poco de orégano, pimentón, sal y pimienta. Hornear a 200º C durante 20 minutos y reservar.
- Triturar la elaboración anterior con un procesador de alimentos añadiendo un poco de agua. Procesar hasta obtener una salsa homogénea y lisa. Reservar.
- Calentar un poco de aceite en una parrilla y cocer las hamburguesas de pollo a fuego medio. Salpimentar.
- Para emplatar, dibujar un círculo con la salsa de tomate y queso y colocar la hamburguesa de pollo en un lateral. Decorar con la cebolla caramelizada y un poco de queso feta desmenuzado.
Si quieres otro acompañamiento para tu hamburguesa de pollo de crecimiento lento, te recomendamos esta receta, con salsa de espárragos y guisantes.