2 h
Fácil
La receta de hoy es perfecta para cualquier ocasión y época del año: pollo relleno de limón, tomillo y ciruelas.
El relleno a base de cítricos es una de las recetas clásicas para este tipo de carne, por lo que suele garantizar el éxito. Además, si os gusta el tomillo, este plato os va como anillo al dedo, ya que su aroma combina muy bien con el limón. Otro punto a su favor es la contraposición entre el salado y los toques dulces que le confieren las ciruelas deshidratadas. Para terminar, rematamos con una guarnición de boniato, patatas baby y ciruelas. ¡Que aproveche!
Elaboración
- Precalentar el horno a 175 °C.
- Lavar y cortar las patatas en cuartos, y el limón en octavos. Reservar.
- Pelar y cortar el boniato en dados medianos. Reservar.
- Picar un diente de ajo (sin el germen), tres ramas de tomillo y dos de romero. Mezclar con un poco de aceite y triturar.
- “Pintar” el pollo con el aceite aromatizado y salpimentar por dentro y por fuera.
- Rellenar con las ciruelas deshidratadas, el limón, un diente de ajo machacado y el tomillo. Verter un poco de caldo y vino blanco por dentro.
- Atar las patas traseras del pollo con un hilo para que conserven su forma durante la cocción y colocarlo en una bandeja de horno con la pechuga hacia abajo.
- Añadir las patatas y el boniato a la fuente. Salpimentar y añadir un poco de aceite de oliva.
- Repartir el resto de caldo de pollo y vino blanco por la bandeja.
- Hornear (con calor abajo y ventilador) durante 90 minutos. Verter de vez en cuando el jugo del pollo por encima. Si queda muy seco, añadir un poco más de caldo.
- Transcurrida una hora, dar la vuelta al pollo y colocarlo con la pechuga hacia arriba, y seguir con la cocción.
- Dejar reposar el pollo durante 10 minutos, cortar en raciones y servirlo junto con las ciruelas, las patatas y el boniato asado.
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